Mi vida de entonces, entre salidas normales y discotecas
con música anestesiante
Me fui
necesitaba vivencias de calado
para poder plantear y cuestionarme
No sabía por qué
me quedé sola
en un altorrelieve de mi misma
sintiendo un dolor vivo, pasional y desbocado
y la mano en el corazón
porque no podía parar ese mundo único e infinito en mí
por dentro...
Afuera acampaban ejércitos turbios y oscuros
una insistente invitación a disociar mi alma
para no ver
para alegrarme falsa y medianamente
(yo que ya había cogido entre mis manos la venda negra)
Fue una doble desdicha
(y no sabiendo nada más que de mi historia...)
¿Dónde se hallaba el hogar del infinito?
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