no podíamos
saber el inicio o final de un tema
la razón para decir o callar
Sé que mis lágrimas se han secado y soy fuerte
y lloro en ocasiones
pero no por la herida
lloro de cuanto sé y el silencio guardado
No habrá un modo de explicarlo ni perdón
no habrá manera de no sentirse atacado por el antes
Como una tumba callaré eternamente mi sentido
la razón de mi presencia de entonces
incluso ante la calumnia del mundo
Daré la razón a los problemas sin arreglo
diré que sí a las imposibilidades
al mal contra el que luché cada día alegremente
sin que nadie supiera de la dicha
Quien es feliz no ve obstáculos en serlo
sabe que todas las tormentas se pasan
no da la vida por perdida
si ha sido necesario el inútil sacrificio
no habrá más aceptación
ni más lengua callada que la mía
aunque sepa que "se mueve"
aunque Galileo pudiera demostrarlo
y fuera condenado al absurdo arresto
No... no lo diré, nunca
porque ese es mi privilegio
Aunque tú sepas
aunque tú sepas por honor
que es una mentira la desgracia
y que por ella te han apaleado
Deja que cuenten lo que quieran, tú ya lo sabes
has mirado debajo
La saliva es barata, y también paga una conciencia tranquila
-y ya me callo-
No es necesario decir lo que se ve
nada es lo que parece
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