Pura

Porque eres tú, igual que antes, pero ya has vuelto
Porque yo no te necesito pero te amo a ti
y porque no te quiero quizá con el apego
y mi amistad es libre como un cristal diáfano
¿podré algún día yo explicarte cuanto sabía?
Por el pasado, y por la confusión
y por la adolescencia tardía tan fructífera
y por la puerta de salida del dolor
por la ventana que crucé para dar a la vida
todo cuanto ya era de la vida
porque sané sanando, porque entendí entendiendo
porque tú estabas muy en ti, pero conmigo
porque el milagro existe para el observador
porque eras el testigo del gran Romanticismo
porque eras esa bella que nadie la Veía:
se limpió el maquillaje
salió de la bañera
lloró por sus zapatos
porque has gritado la verdad a la mentira
porque volviste a confiar en lo incesante
Sí, hallamos esa cúspide de la intensidad
por reunir los cristales rotos y mágicos
por aquel juego espejeante de la duda
porque así amamos la Belleza desoída
así asumimos esos puzzles perdidos del abuso
y se ha quedado aquella vida que esperábamos
a nuestro lado
y fue al fin nuestra...