sábado, 31 de enero de 2015

Hay daños que se quedan tan dentro que solo pueden convertirse en lo mejor de uno mismo.

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Fue nuestra vida un agujero insidioso de repugnantes bobinas de vicio.

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Comprendo que negué mi propio corazón callándome. Comprendo que todo el rechazo me lo imaginé. Si tan solo él pudiera haberlo sabido... Triste inexperiencia, adolescente vaca flaca que regurgita recuerdos.

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La belleza está en la más cavernosa de las profundidades, allá donde aparentemente se hallan el miedo o el espanto. Un@ llora y todo lo comprende. Durante demasiado tiempo me la he callado: no sabía sacarla a relucir.
Hablad, no guardéis un angustioso silencio. No importa de qué manera escupáis las palabras. Conectáos con vuestra humanidad. Que vuestra historia viaje con otras historias. Que todo vuelva a comenzar.
Las aguas se mezclan con las aguas; eso es la luz.

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