Las percepciones en el sentido en que me hablas en mi
vida no son tan fluídas pero todo ha cambiado desde la última vez que
te dije que me sentía muy dentro de mí y no podía salir. Ahora ni fuera,
ni dentro. Es raro. Todos parecen estar dentro, o fuera, miran desde
dentro, valoran desde fuera o cosas así. Yo soy una, total. Mola, es
difícil de compartir. Por lo demás ahora percibo las semanas y todavía
no he llegado a los días. Es como un rito inacabado al que hay que echar
semillitas para que crezca, así liberamos una plantita y la plantamos a
cielo descubierto. No soy una persona rutinaria y supongo que sí, hay
cosas maravillosas y cosas incómodas. Tuve en cuenta cuando una vez me
dijiste que no tenía que impedirme ser yo misma por miedo. Me acepto,
soy una persona exigente y rara. Hay flores raras, gente que atraviesa
directamente el campo y se alimenta de lo silvestre. Me gusta que todo
se halle a mi alrededor tan salvaje como es su naturaleza.
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