domingo, 12 de abril de 2015

La crisis de masculinidad y los “nuevos hombres”

Todavía no comprendo por qué no se dan cuenta de que les ha pasado lo mismo que a nosotras, las mujeres. En fin... A ver si toman conciencia porque ver a tantos hombres comportarse como estúpidos no es un plato de gusto.
Yo les estoy reconociendo a ellos, muchos de ellos solo me banalizan, me cambian de tema, frivolizan para seguir en su posición y cuando hablo tiran balones fuera, hacen bromitas, se callan...
Solo me es posible reconocerles desde la mujer sin poder que ha habido en mí, ellos, simplemente no reconocen a una mujer junto a ellos. Todavía no nos reconocen y ven los sexos como una cierta oposición respecto a ellos de lo que ha sido llamado el sexo femenino, sienten eso como otra cosa, algo desconocido o misterioso, cerrado a sus ojos, extraño incluso, no como complementariedad y verdadera naturaleza humana. En esa posición no están haciendo nada sencilla la compatibilidad y se muestran esquivos.
Me gustaría que se alegraran de conocerse, que conocieran esa parte perdida de sí mismos porque se comportan de un modo muy poco natural y muy inflexible, pretendiendo reivindicar su propia naturaleza -incluso la de tod@s desde su propia mirada- al excluirse o excluirnos como eso otro, como ese "esto es así por naturaleza", e incluso en la ciencia se puede notar ese viejo tufillo que al final viene a decir "los hombres somos así" y esas costumbres que llevan puestas.
No parece que se den cuenta de los largos tentáculos del patriarcado, desparramados por todas partes. Por todas partes... Tranquilos, os han vendido la peor moto del mundo y os la habéis comprado porque creíais que era mucho más guay; ha sido un truco visual y palabrería de un vendedor, ¿lo habéis notado ya? Hay otra opción, ¿verdad?. En fin, "el hombre" y "la mujer" sin que haya diversidad en todo ello -sé que no son solo hombres sino también mujeres los que tienden a relacionarse de este modo tan carente, estereotipado, gilipollesco y banal-.
Este es el hecho, lo demás es la cubierta. Afortunadamente, las motos de verdad son mucho más guays que ese paquete de moto.
Me da pena... Se pierden lo mejor por conservar lo que creen su posición, un supuesto derecho. Supongo que tienen miedo, supongo que muchos ya pueden sentir desde ellos mismos la marginación que muchas de nosotras hemos sentido, supongo que es justo y necesario que se bajen de la burra y eso les joda y les moleste. Supongo que en realidad se defienden porque no les resulta cómodo. ¿Verdad que en un fastidio este proceso? Se llama aprendizaje y reconocimiento.
Yo les reconozco; aquí estoy y aquí estaré. Disponible -aunque no me de la real gana bajarme las bragas para ellos-. Disponible, para honrarles, para no hacerles revolcarse en su propia mierda facilona, para no revolcarme yo, para que no me utilicen más como unos putos cerdos desconsiderados e irresponsables, para que no usen las relaciones a su medida sino que se entreguen ellos por su valor y no esperen cómodamente, con la mano abierta a que las cosas se les den para tenerlas, para que entiendan que también pueden perder lo que creen que tienen, para que aprendan a dar, para que hagan realidad el sueño que siempre parecen buscar no sé donde, para que no digan lo que se ha hacer y sean comprensivos. Para que dejen de defenderse de la vida y se sientan enamorados de ella. Para que hagan pie. Para que dejen de vivir de ilusiones. Que se atrevan.
Esto, y no otra cosa, es una mujer. La real. La realmente disponible.
¿Hay alguien ahí? Si es así, me alegraría mucho. Pasad, está abierto.
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"Y es que a muchos hombres les cuesta comprometerse. Con las mujeres, con los hijos, con las responsabilidades de la vida. Su constante deseo de escapar (de sí mismo, de sus sentimientos, de sus compromisos, de sus problemas, de su paternidad) revela, según algunos expertos en los estudios de las masculinidades, la inmadurez de algunos para hacer frente a la vida."

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