lunes, 9 de marzo de 2015

Somos diosas

La mujer no entendió el significado de igualdad... se perdió por el camino...
Igualdad no es ser como el hombre.. no es dominar al hombre, no es quitarle su puesto...
Igualdad es desde nuestra feminidad, desde el valor que suponer ser una matriz dadora de vida aceptar y respetar al hombre con todos sus valores, y hacer al hombre nuestro aliado, no es luchar por el poder, es compartir el poder que tenemos ambos, para evolucionar hacia la misma meta.. compartiendo el camino...
Igualdad.. no es pensar como un hombre y actuar como él dentro de la sexualidad, es hacer comprender que la mujer jamas sera hombre ni el hombre mujer porque fueron creados para que fueran diferentes y crear el equilibrio...
La igualdad que buscaba la mujer se desvío por el camino y muchas perdieron la grandeza de sentirse mujer... femenina.. Diosa.. poderosa sin poder para dominar pero con el máximo poder concedido para amar... para dar... para bendecir...
Con el poder sexual, que bajo el influjo del amor incondicional engendrara vida en su vientre, para que la especie siguiera en el planeta...
El cristianismo anuló a La diosa..haciéndola culpable de lo malo en el planeta... pecadora... sucia...
Anuló a las tres Marias mas importantes de todo el evangelio, dejándolas a merced de la palabra de los discípulos y escritos manipulados por lo masculino...
La diosa fue anulada... aniquilada por la iglesia...
Pero realmente antes de las escrituras... la mujer era venerada, valorada por lo que representaba en la tierra...
Venerada por el hombre... parte del hombre no aparte de el... no existía separación, había integración...
Os invito mujeres a contactar y despertar a la Diosa que tenéis dentro... la conexión con la Tierra... el Cielo... el Universo... con el hombre y los ancestros... con lo eterno...
Hombres bienvenidos a compartir ese mágico renacer de la diosa.
Hombres, gracias por comprender... valorar y aceptar nuestro camino... igual que nosotras comprendemos... valoramos y aceptamos el vuestro, aunque no sean los mismos... pero si complementarios para nuestra evolución como almas, pues ambos, hombre y mujer somos amor incondicional en acción...

Ana Náyades

No hay comentarios:

Publicar un comentario